En medio de un nuevo amor, la capocómica intenta mantener en pie su familia y recurre a la espiritualidad.
Tras su paso por el Bailando y un viaje por los Emiratos Árabes, Carmen Barbieri se instaló en Mar del Plata, donde protagoniza Citas Peligrosas. A cinco años de su separación de Santiago Bal, la capocómica tiene un nuevo romance en puerta y apuesta a un cambio espiritual.
"Soy argentina, sanguínea, peleadora y cabrona, pero todo eso lo estoy bajando. No me hace bien pelear o discutir. Nunca inicio una guerra. La continúo, eso sí. Si me decías algo, te contestaba. Ahora cuento hasta tres, respiro hondo y me doy cuenta que no vale la pena", reflexionó en diálogo con Paparazzi.
"Estoy en una época de gran cambio. Me asusta, porque los cambios me asustan, aunque en esta etapa de mi vida es para bien. Me alejo de los lugares donde me siento incómoda o me hacen sentir mal. Y me alejo de la gente que no tiene una buena vibra, que habla mal de otra gente o que está todo el día puteando o quejándose. Soy muy quejosa, pero no de lo que me pasa en la vida sino de lo que sucede en mi cuerpo. Empecé a perdonarme y perdonar, que me costó mucho", admitió.
Y agregó: "¿Perdonarme qué? Cosas que uno hace, de lastima sin saber, sin darse cuenta. No tengo claro a quién lastimé o qué hice de malo, pero sí que el ser humano es un poco bueno y un poco malo. Y uno, a veces, hace cosas sin darse cuenta".
En cuanto al futuro, Carmen fue convocada para serla figura principal de una comedia musical que debutaría en El Nacional o en el Luna Park a mitad de año.
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