San José de la Dormida. Ayer habló el padre de uno de ellos, comisario. Esta vez fue el turno de la madre del otro, una familia que dirige el Registro Civil. Manifestación vecinal.
Luego del brutal ataque y golpiza cometido contra don Luis Carlos Monzerrat (74), por parte de dos jóvenes de 18 años que lo desfiguraron porque los retó cuando orinaban su puerta, vecinos de la localidad cordobesa de San José de la Dormida se manifestaron frente a la comisaría local para exigir que el hecho no quede impune.
También, frente al comisario local y al director temporal de la Departamental Tulumba, comisario mayor Mario Bulacio, pidieron mano dura para frenar la droga en la localidad. Quieren que “se muevan” y que “metan presos a los que traen y venden la droga”, precisó Informados Diario.
Esto se debe a la bronca que causó saber que los que atacaron al anciano fueron los hijos de un comisario y del jefe del Registro Civil local: familias acomodadas de la zona.
El comisario, Martín Saavedra, reconoció ayer que su hijo fue uno de los autores y dijo que lo hizo "bajo los efectos del alcohol y de estupefacientes". Es decir, que estaba drogado.
"Nosotros no hemos educado a nuestro hijo para esto. Si hubiera estado en sus cabales, no habría hecho lo que hizo", señaló el comisario, quien aceptó que sabía que su hijo "consumía porros", pero "no algo tan grave como esto".
Esta vez habló la madre del otro agresor, Ana Martínez, quien también aceptó que su hijo sufre adicciones, y en ese sentido pidió ayuda: "Solos no podemos, necesito una guía, pido a las madres que tienen hijos como el mío".
La mujer es esposa de Ernesto Zamora, titular del Registro Civil de la localidad con quien tiene varios hijos, uno de ellos el sindicado autor que golpeó, pateó, maltrató e incluso robó pertenencias a Monzerrat, a quien además amenazaron con violar a su hija, que es sordomuda.
Ante la indignación social, la mujer rogó que en lugar de juzgarlos y criticarlos, los ayuden. "Le pido disculpas de todo corazón a la familia de este señor por lo que ha pasado. Mi hijo ese día estaba sacado, no estaba bien, ninguna persona que esté bien hace una cosa así”, remató.
Ambos acusados fueron imputados por la Fiscalía de Deán Funes por “robo, violación de domicilio, lesiones leves y daño”. Estuvieron presos unas horas y ya están en libertad.
También, frente al comisario local y al director temporal de la Departamental Tulumba, comisario mayor Mario Bulacio, pidieron mano dura para frenar la droga en la localidad. Quieren que “se muevan” y que “metan presos a los que traen y venden la droga”, precisó Informados Diario.
Esto se debe a la bronca que causó saber que los que atacaron al anciano fueron los hijos de un comisario y del jefe del Registro Civil local: familias acomodadas de la zona.
El comisario, Martín Saavedra, reconoció ayer que su hijo fue uno de los autores y dijo que lo hizo "bajo los efectos del alcohol y de estupefacientes". Es decir, que estaba drogado.
"Nosotros no hemos educado a nuestro hijo para esto. Si hubiera estado en sus cabales, no habría hecho lo que hizo", señaló el comisario, quien aceptó que sabía que su hijo "consumía porros", pero "no algo tan grave como esto".
Esta vez habló la madre del otro agresor, Ana Martínez, quien también aceptó que su hijo sufre adicciones, y en ese sentido pidió ayuda: "Solos no podemos, necesito una guía, pido a las madres que tienen hijos como el mío".
La mujer es esposa de Ernesto Zamora, titular del Registro Civil de la localidad con quien tiene varios hijos, uno de ellos el sindicado autor que golpeó, pateó, maltrató e incluso robó pertenencias a Monzerrat, a quien además amenazaron con violar a su hija, que es sordomuda.
Ante la indignación social, la mujer rogó que en lugar de juzgarlos y criticarlos, los ayuden. "Le pido disculpas de todo corazón a la familia de este señor por lo que ha pasado. Mi hijo ese día estaba sacado, no estaba bien, ninguna persona que esté bien hace una cosa así”, remató.
Ambos acusados fueron imputados por la Fiscalía de Deán Funes por “robo, violación de domicilio, lesiones leves y daño”. Estuvieron presos unas horas y ya están en libertad.
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