Lo indicó el embajador argentino Diego Guelar. "Muy pocas potencias hubieran actuado así", destacó. El PRO criticaba que el acuerdo que firmó CFK no impedía este tipo de uso.
El Gobierno argentino logró que China aceptara la prohibición de uso militar de la estación espacial que colocaron en Neuquén.
Lo confirmó a Cadena 3 el embajador argentino en ese país, Diego Guelar, quien destacó la actitud del gigante asiático: “Muy pocas potencias hubieran actuado de esa forma”.
El PRO cuestionaba el acuerdo firmado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner ya que allí no existía ninguna clausula que prohíba el uso de ese espacio como una base militar, por eso cuando llegó al poder comenzó con las renegociaciones con Pekín para aclarar este tema que generó gran polémica en los últimos años.
La gran preocupación era que la empresa estatal elegida para controlar el lugar, Satellite Launch and Tracking Control General (CLTC), depende del Ejército Popular chino.
La intención del Presidente no era anular el tratado sino negociar en buenos términos para incluir una cláusula específica que derribe el eje de la controversia.
“China ha aceptado agregar un artículo negando actividad militar en la base de Neuquén y admitiendo que la única utilización posible es de uso civil”, contó Guelar.
Y destacó la actitud del país asiático: “Podría mantener la dualidad, pero es valorable que se autorestrinja y entienda que debe modificarse lo que negociaron anteriormente. Es un aliado estupendo”. Fuente:Cadena3
Lo confirmó a Cadena 3 el embajador argentino en ese país, Diego Guelar, quien destacó la actitud del gigante asiático: “Muy pocas potencias hubieran actuado de esa forma”.
El PRO cuestionaba el acuerdo firmado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner ya que allí no existía ninguna clausula que prohíba el uso de ese espacio como una base militar, por eso cuando llegó al poder comenzó con las renegociaciones con Pekín para aclarar este tema que generó gran polémica en los últimos años.
La gran preocupación era que la empresa estatal elegida para controlar el lugar, Satellite Launch and Tracking Control General (CLTC), depende del Ejército Popular chino.
La intención del Presidente no era anular el tratado sino negociar en buenos términos para incluir una cláusula específica que derribe el eje de la controversia.
“China ha aceptado agregar un artículo negando actividad militar en la base de Neuquén y admitiendo que la única utilización posible es de uso civil”, contó Guelar.
Y destacó la actitud del país asiático: “Podría mantener la dualidad, pero es valorable que se autorestrinja y entienda que debe modificarse lo que negociaron anteriormente. Es un aliado estupendo”. Fuente:Cadena3
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