Los bomberos no logran contener las llamas, que ya arrasaron con más de 34.500 viviendas y 3.600 hectáreas en San Bernardino. Se declaró el estado de emergencia.
Al menos 82.000 evacuados dejó un incendio fuera de control que se declaró ayer en un área montañosa del distrito californiano de San Bernardino, a unos 115 kilómetros al noreste de Los Ángeles, Estados Unidos.
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Además, el siniestro arrasó más de 34.500 viviendas y 3.600 hectáreas, mientras que los bomberos y servicios de emergencia no lograron por el momento contener las llamas cuyo foco se sitúa en el Puerto de Cajón, informó a través de Twitter el jefe del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California, Daniel Berlant, citado por EFE.
El fuego, al que lo combaten sobre el terreno más de 700 efectivos, avanzó con mucha rapidez en un solo día y provocó que el gobernador de California, Jerry Brown, declarara el estado de emergencia en San Bernardino.
Las autoridades mostraron además su preocupación porque el calor, el viento y la baja humedad, unidos a la severa sequía que desde hace años sufre California, entorpezcan los trabajos de los bomberos.
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