La comida casera hecha en casa es una verdadera delicia para nuestro paladar.No muchas comidas pueden hacerse en la parrilla, pero en esta ocasión apuesto esta deliciosa pizza casera es una de las recetas más adecuadas para realizar si lo que buscamos es una masa crocante, fina, y de lo más deliciosa.
Ingredientes:
*130 gramos de harina
*Mantequilla
*Aceite de oliva
*Pizca de sal
*Queso en cubos
*Rodajas de tomate
*Morrón
*Orégano
*Cebolla
*Salsa para pizza
*Ajo
*Papel de aluminio
*Pinzas para manipular la masa
*Espátula de metal
Preparación de la masa:
Para comenzar con la preparación de la masa, lo primero que hay que realizar es mezclar la mantequilla con unos 100 gramos de harina, incorporamos también la pizca de sal, y una pequeña cucharada de aceite de olvida, dos sí así se lo prefiere.
El secreto, después de tener todos los ingredientes previamente homogéneos, es amasar rápidamente, y añadir la cantidad de agua que sea necesaria hasta lograr la consistencia elástica y suave que estamos buscando. Parece difícil, lo sé, pero con un poco de paciencia y buena mano en la cocina es posible conseguir una estupenda masa de pizza.
Luego solo resta espolvorear, o enharinar la masa todas las veces que sea necesario, dejar reposar por una hora al menos, y estamos listos para pasarnos a la parrilla.
Cocción de la masa
Primero que nada, asegúrate de tener todos los ingredientes y materiales necesarios para realizar la cocción. Precalienta la parrilla, y engrasa un trozo de papel aluminio que sea más grande que la masa. Utilizaremos el papel aluminio para trasladar la masa de nuestra mesada a la parrilla; enharina y amasa una porción y estamos listos para comenzar.
Coloca una pequeña cantidad de masa de pizza en el papel aluminio, retírala cuidadosamente y deja el total del contenido en la parilla. Coloca la masa cerca del fuego pero no demasiado, tampoco queremos que quede quemada.
Recuerda, además, que las brasas serán colocadas por debajo de las rejillas. De esta manera, dentro de unos 30 minutos ya estará lista para voltearla, y realizar la cocción en su otro lado.
Después de tener la base en su punto ideal, ya podemos incorporarle los gustos y sabores que más nos gusten.
Basta con dejar cocinar hasta que el queso quede perfectamente derretido, y listo. ¡Ya tenemos una deliciosa pizza a la parrilla!
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