Se trata del primer centro de salud intercultural, en el que se conjurá la medicina pública tradicional con la práctica de los pueblos originarios de la región. La idea es compartir saberes y experiencias.
En el departamento de Aluminé, en Neuquén, comenzará a funcionar el primer hospital intercultural mapuche. Este centro de salud, que será el segundo de Latinoamérica y el primero en el país, se construirá en Ruca Choroi y tendrá una superficie de 522 metros cuadrados. Es un trabajo en conjunto entre el equipo técnico del área de salud provincial y el equipo de salud rural del hospital Aluminé junto a las comunidades Mapuche Aigo y Huenguihuel, que se harán cargo de la mano de obra.
En la provincia de Neuquén, el 8% de la población es mapuche, uno de los pueblos originarios que habitan Chile y Argentina desde antes de la llegada de los españoles. Eso quiere decir que 8 de cada 100 personas se reconoce como originario y, con ello, reconoce y practica su cultura.
El primer paso fue el diseño del edificio, que se ubicará en tierras de la comunidad Huenguihuel. “Habrá un lugar para hacer fogones, para los curadores mapuches, los componedores de huesos, para los yerbateros, y un espacio ceremonial para el machi, la máxima figura de la ceremonia curativa mapuche”, comentó Fabian.
Un ejemplo explica el tipo de diferencias entre una y otra cultura. Con respecto a la orientación de las camas del hospital hacia el oeste: “El oeste, detrás de la cordillera, es el lugar al que van las almas en la cultura mapuche luego de su paso por el mundo”, explicó el médico. Y agregó: “era algo que molestaba a los pacientes de las comunidades; era como si se los predispusiera para el final, la muerte”.
Publicar un comentario