Los chats de Whatsapp y pruebas objetivas contundentes llevaron a la sentencia unánime por homicidio doblemente calificado.
El hecho ocurrió el 26 de abril de 2017, cuando la joven Nayara Ibarbia tenía 17 años, falleció el 3 de mayo de ese mismo año.
Gustavo Villarreal ha sido condenado a prisión perpetua por el femicidio de su novia Nayara Ibarbia en Monte Maíz. El hombre conducía un Fiat Uno en compañía de Nayara cuando chocó contra un camión estacionado, causándole heridas graves que resultaron en su muerte. El juicio se desarrolló con jurados populares y la Cámara del Crimen de Bell Ville declaró a Villarreal culpable de homicidio doblemente calificado por el vínculo y por mediar contexto de género.
La abogada María Eugenia Fernández, representante de la familia de Nayara, se mostró conforme con la sentencia y destacó que fue una decisión unánime. Fernández subrayó que las pruebas presentadas durante el juicio fueron objetivas y contundentes, incluyendo los mensajes de Whatsapp y las pericias tanto psicológicas como mecánicas.
Villarreal ha estado detenido en la cárcel de Villa María desde mayo de 2020, cuando la fiscalía cambió la carátula de la causa de homicidio culposo a femicidio. La pena impuesta a Villarreal coincide con el pedido de la fiscal de Cámara, Andrea Heredia Hidalgo, y el tribunal rechazó el pedido de inconstitucionalidad que planteó la defensa de Villarreal contra la figura del dolo eventual.
La familia de Nayara había denunciado episodios de violencia antes del choque fatal, y los investigadores concluyeron que Villarreal intentaba morir en el mismo siniestro en el que perdió la vida su novia de 17 años.
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