La imputación de dos miembros de Umepay genera controversia en la comunidad, afectada también por recientes incendios en la región.
En un desarrollo legal que ha sorprendido a la comunidad de Villa Yacanto, dos cofundadores de la ecoaldea de montaña Umepay han sido imputados por la Justicia bajo sospecha de usurpar un campo colindante. La denuncia, presentada en marzo de este año, ha llevado a la fiscal Paula Bruera a iniciar una investigación que ha revelado una serie de irregularidades en torno a la propiedad.
El caso, que también involucra a un tercer imputado —el cuidador del campo, un exempleado del denunciante—, se enmarca en el artículo 181 del Código Penal, que trata sobre la usurpación de propiedades. La fiscal confirmó que los cofundadores, quienes permanecen en libertad, fueron indagados y que ha solicitado al Juzgado de Control de Río Tercero el "lanzamiento de los ocupantes" del terreno en disputa.
Fuente de la imagen: "La Voz" |
El denunciante, un hombre oriundo de Villa María, alega ser el titular de derechos posesorios sobre un campo de aproximadamente 20 hectáreas cercano al río Grande. Según su abogado, Federico Pizzicari, el interés previo de los imputados en adquirir la propiedad se evidencia en las conversaciones mantenidas entre 2020 y 2022. Sin embargo, en una maniobra que el letrado califica de "burda", los acusados habrían firmado un boleto de compraventa con el casero del campo durante la ausencia del verdadero dueño, ocupando el terreno en noviembre de 2023.
El relato del abogado detalla cómo, al regresar a su propiedad, el denunciante encontró dos personas y dos casillas móviles en su terreno, y se le impidió el acceso debido a un candado en la tranquera. Pizzicari sostiene que los imputados no pueden alegar desconocimiento sobre la titularidad del terreno, dado su anterior interés en la compra.
El decreto de la fiscalía también menciona que los sospechosos ofrecieron al casero del campo una vivienda en Villa Yacanto y una camioneta a cambio de que abandonara sus labores de cuidado del inmueble. Esta supuesta acción de "connivencia" habría facilitado la ocupación del terreno, donde los denunciados colocaron casillas y contrataron a otras personas como serenos.
A raíz de la usurpación, el denunciante ha perdido acceso a otra propiedad que le pertenecía, lo que ha motivado una nueva denuncia. La Justicia ha dispuesto que se le entregue una copia de las llaves del campo en cuestión para que pueda acceder a su otro inmueble, del que ha estado privado durante entre ocho y nueve meses.
Desde la dirección de la comunidad Umepay, se ha optado por no realizar declaraciones sobre la situación actual. Sin embargo, se conoce que más de 100 personas residen en la ecoaldea, que se distingue por su enfoque en la sostenibilidad y en la gestión de residuos. Este emprendimiento, nacido del deseo de un grupo de amigos de Buenos Aires, ha construido una comunidad en medio de un entorno natural privilegiado, donde se llevan a cabo retiros, talleres y actividades turísticas.
La noticia de esta imputación se suma a los recientes desafíos que ha enfrentado la comunidad, incluidos los devastadores incendios de septiembre, que afectaron varias viviendas y áreas forestadas de la ecoaldea. La situación ha reabierto el debate sobre la seguridad y la propiedad en un contexto donde la sostenibilidad y la convivencia en la naturaleza son prioridades para sus habitantes.
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